Publicado en Postres y recetas el 17/07/2017
Los amantes del helado y el chocolate lo disfrutan durante todo el año, pero ahora, en verano, es incluso más apetecible. Para ello, os traemos una receta de helado de chocolate para que lo hagáis en casa. Un helado fácil de hacer, artesano y delicioso.
En primer lugar, bate las yemas de huevo con el azúcar.
A continuación, pon a calentar a fuego bajo la leche con la nata y el cacao en polvo. Muévelo continuamente hasta que se mezclen y el cacao se disuelva. Una vez esté la mezcla lista, añade el chocolate para fundir y bate hasta que se fusione con la mezcla. Si quieres, puedes añadir una pizca de sal a la mezcla para intensificar el sabor del chocolate. En cuanto al chocolate para fundir, puedes elegir entre chocolate negro o chocolate con leche, según te guste más uno u otro.
Ahora junta la mezcla de yemas y azúcar con la de chocolate, sin retirar del fuego. Ten cuidado de que no hierva y mueve continuamente. Al pasar unos minutos, apártalo del fuego y deja que se atempere.
Para terminar, si tienes heladera, ya sabes cómo actuar. Incluye la mezcla y enfríala durante 30 minutos aproximadamente. Si no la tienes, el proceso es un poco más largo pero el resultado será el mismo. Pon la mezcla en un recipiente, tápala e introdúcela en el congelador. Cada media hora, tendrás que sacar la mezcla y removerla. Este proceso tendrás que repetirlo 6 veces. Con ello, la consistencia del helado será la óptima.
El huevo es un ingrediente fundamental en los helados artesanales, espesando la mezcla. Si no puedes por alergia, o bien no quieres incluir huevo en tu helado, puedes usar almidón, generalmente maicena, en su lugar. En este caso, los ingredientes son:
El proceso es similar a la receta de chocolate con huevo. Lo primero que tienes que hacer es hidratar la maicena en 100 ml de leche fría. Remueve hasta que desaparezcan los grumos.
Por otro lado, en un cazo pon el resto de la leche junto a la leche evaporada, la nata, el azúcar y la sal. Añade también la leche con la maicena y calienta a fuego bajo. Mueve continuamente hasta que hierva durante un par de minutos.
Mientras la base se va calentando, puedes derretir el chocolate al baño maría o en el microondas, luego añade el cacao en polvo y mezcla bien,
Sin retirar la base del fuego, incorpora el chocolate y mezcla hasta que quede homogéneo. Por último, apaga el fuego y añade el extracto de vainilla.
Deja enfriar la mezcla a temperatura ambiente tapándola con un film. Lo mejor es dejarla reposar durante la noche en la nevera y al día siguiente, repetir el proceso visto en la receta anterior. Bien utilizar la heladera o bien ponerlo en el congelador y moverlo cada 30 minutos durante 3 horas.
Estos puros de chocolate se pueden disfrutar en cualquier sitio, ideales para bodas, bautizos y comuniones
En nuestra foto en chocolate todo se puede comer, la cuestión es si te atreves
